Fuente: CCOO y UGT / Los secretarios generales de CCOO y UGT rechazaron el sábado por la mañana, en rueda de prensa, la reforma laboral aprobada el viernes por el Gobierno. Ambos han asegurado que es una reforma que facilita y abarata de manera generalizada el coste del despido y elimina controles y tutelas, y que va a tener como consecuencia acelerar la destrucción de empleo. En palabras del secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, «es una reforma radical impuesta por el FMI, el Banco Central Europeo, Alemania y Francia, y está escrita por la pluma de la CEOE» que, anunció, «merece el máximo reproche y va a ser respondida con una movilización que se desarrollará de manera ascendente y sostenida».

Toxo comenzó su intervención -previamente se habían reunido delegaciones de las Ejecutivas de CCOO y UGT-, explicando que «la reforma no se justifica ni por el contexto, ni por las formas ni en sus contenidos». Es una reforma radical que tiene como lógica el desmantelamiento progresivo del papel del derecho del trabajo en nuestro país y que, según afirmó, «responde fielmente a las exigencias de la Fundación de los bancos FEDEA». «Es una reforma impuesta por el FMI, el BCE, Alemania y Francia, y escrita por las plumas de CEOE y FEDEA», subrayó.

Para el secretario general de CCOO, además de ponerse de manifiesto la falta de autonomía del Gobierno, salvo que se haya convertido en portavoz de esas instituciones -«parece que estuviéramos en una situación de democracia vigilada», lamentó -, la reforma va a acelerar la destrucción de empleo por el abaratamiento del coste del despido que supone y las nuevas facilidades que se añaden a las ya existentes por la eliminación de controles y tutelas para despedir. «Y lo que es peor, en términos de garantías en relación al uso de los recursos públicos, se da la llave de la caja de la Seguridad Social a las empresas para que la utilicen a su conveniencia», denunció.

Según explicó Toxo, «se dice que se pretende reducir la dualidad del mercado de trabajo y curiosamente sólo se toca la contratación estable, no se toca la temporal». Además, añadió, se crea una nueva figura de contrato sin indemnización para aplicar en las empresas de menos de 50 trabajadores, el 95% del tejido empresarial, que «es una figura para el despido libre».

Tras desgranar los contenidos de la reforma, Toxo denunció también que el Gobierno trate a los perceptores del desempleo como si fuera un delincuente, como si estuviera en paro por voluntad propia, al introducir prácticas que en nuestro país «sólo se utilizaban para los reos», en alusión a las prácticas obligatorias.

«La reforma laboral merece el máximo reproche», aseguró con firmeza el secretario general de CCOO, quien anunció que CCOO y UGT han decidido poner en marcha un proceso ascendente, creciente y sostenido de movilización.

Movilizaciones

En este sentido, después de una primera fase de información -» los sindicatos van a celebrar asambleas en todos los centros de trabajo para explicar las consecuencias de la reforma» -, según explicó Toxo, el proceso de movilización tiene dos hitos: el 19 de febrero, en el que «pretendemos convertir las calles de todas las ciudades en un clamor contra la reforma», y el 29 de febrero, fecha en la que hay convocada una jornada de acción europea.

«El objetivo de la movilización es modificar el contenido de la reforma», destacó Toxo, quien sin embargo abogó también por corregir los efectos de la reforma mediante la negociación, aprovechando para ello la reunión que CCOO y UGT mantendrán el lunes con la Ministra de Empleo. «La evolución de los acontecimientos y el grado de receptibilidad de los trabajadores, determinará posteriores actuaciones», concluyó.

Más información: Nota informativa reunión Secretarios Generales de CCOO sobre reforma laboral